Nos levantamos en San Francisco con muchas ganas e ilusión por hacer una excursión que nos apetecía mucho, la visita a Alcatraz.
Para ir a Alcatraz hay que reservarlo con bastante antelación (más de 3 meses) en una de las compañías autorizadas. Nosotros lo reservamos con Alcatraz City Cruises, aunque hay otras compañías. Nos costó 90$ (85€) para dos personas (los bebés no pagan) y está incluido el transporte en barco, de ida y vuelta, y la visita por la isla. La compañía se encuentra en el pier 33 y tienes que estar 45 minutos antes de la hora que hayas reservado. Para volver, puedes hacerlo a cualquier hora. Tienen una frecuencia de 30 minutos.
Recomendamos ir temprano para evitar las aglomeraciones en la isla. Aunque hay bastante movimiento de gente, se puede ver bien.
En la zona interior del embarcadero del pier 33 no se puede comer ni beber, pero hay baños. Una vez llegas, hay que hacer la cola para embarcar. Reparten abanicos, que no entendíamos muy bien para que servían hasta que llegamos a la isla. Y es que, está llena de moscas.
El trayecto en ferry dura unos 12 minutos. Se puede ir en la parte exterior o en la parte interior. Nosotros recomendamos, yendo abrigado, ir en la parte exterior para poder contemplar la llegada a la isla. Es muy emocionante y produce una mezcla de sensaciones, sobre todo si piensas en que hace unas décadas, la gente iba en barco para pasar allí muchos años preso.
Alcatraz fue construida para llevar a los presos más peligrosos y escurridizos de los Estados Unidos, incluido Al-Capone. Se creía que era un lugar del que nadie podría escapar. Se estableció como prisión en 1934.
Una vez pisas Alcatraz, hay un Ranger que explica brevemente las normas de la isla. Indica que se puede visitar con audio-guía la zona de las celdas, incluida en la visita, y luego recorrer por libre la zona. Además, indica la zona de baños y que sólo se puede comer en la explanada de entrada, pero no dentro. También informa sobre las charlas o explicaciones que hay cada día. Por ejemplo, cuando nosotros fuimos había una charla sobre Al-Capone a las 11:30 y la apertura de celdas, con su explicación, sobre las 12:30.
En la explanada de entrada hay un cártel donde puedes hacerte una foto y una torre con mapas de la isla, por 1$, en muchos idiomas. También hay una pequeña tienda de souvenirs.
Puedes estar en la isla todo el día, aunque nosotros creemos que con 3 horas es más que suficiente. Empezamos por la zona de celda. En la sala de duchas, te dan un audio-guía, en el idioma que elijas, y puedes escuchar un audio de unos 45 minutos en el que te dirige por el bloque de celdas dando explicaciones de algunos guardias y presos que estuvieron en la isla. Merece la pena escuchar las explicaciones sobre los presos más famosos, la segregación, los intentos de fuga y otras historias del día a día en Alcatraz.
Nosotros recorrimos la zona de celdas siguiendo el audio-guía, pero luego paseamos por nuestra cuenta.
Nos hizo ilusión ver las celdas de los hermanos Anglin y de Frank Morris, los presos que escaparon de La Roca. Lo hicieron utilizando unas 12 cucharas de acero para rascar la zona corroída del cemento, alrededor de una rejilla de ventilación. Construyeron máscaras para hacer creer que estaban despiertos y salieron por la zona trasera de las celdas hasta la azotea, desde donde bajaron al muelle y, supuestamente, escaparon hacia San Francisco con unos botes hinchables que habían construido. No se conoce su paradero desde entonces, a pesar de las múltiples teorías.
Poco después de la fuga, la cárcel cerró el 21 de marzo de 1963. De hecho, se puede ver la fecha en el menú del comedor de la prisión.
Después, durante unos años, la isla fue ocupada, en 1969, por los indios nativos americanos que reclamaban el territorio como suyo, hasta que en 1971 fue desocupada, tras un acuerdo con el Gobierno para abandonarla.
Después acudimos a la demostración de cómo cierran y abren las celdas. Es muy curioso y a la vez escalofriante. Explican los mecanismos y el día a día de los presos. A continuación, fuimos a ver el comedor, la sala de control, el patio, la casa del alcaide, el parque de bomberos, los apartamentos y barracones de los guardias… Al salir, hay una pequeño museo y una tienda de souvenirs.
Desde allí volvimos, sobres la 13:30, al muelle para coger el barco de vuelta. Tuvimos que esperar un poco, pero entramos en el ferry. Al llegar nos fuimos a comer al restaurante XICA, 100% sin gluten.
Tras la comida, nos fuimos hacia Lombard Street, una de las calles más famosas de San Francisco, con un recorrido serpenteante y rodeada de coloridas casas. Se puede subir andando aunque hay varias cuestas. Las vistas desde arriba merecen la pena.
Desde Lombard bajamos andando hasta Fisherman’s Wharf. Es una zona muy animada y turística, con tiendas, puestos de comida, bares y restaurantes donde probar el plato típico, la langosta, en muchas de sus variantes, sobre todo en bocadillo. Los bares son bastante caros.
También, en la zona del pier 45 hay un museo donde se puede ver un barco y un submarino en desuso de la Segunda Guerra Mundial. Puedes verlos desde fuera de manera gratuita, aunque para acceder al interior hay que pagar.
En el pier 45, hay una exposición de máquinas de Arcade antiguas. La entrada es gratuita. Además, puedes jugar a las máquinas antiguas. Un sitio muy curioso.
Desde allí fuimos andando hasta pier 39, donde hay una zona muy animada de bares, tiendas de souvenirs, restaurantes…
Y también los famosos leones marinos de San Francisco.
Y desde allí, nos fuimos a coger una de las líneas del Cable Car, todo un icono de San Francisco. Si tienes un pase diario de San Francisco (13$ al día) en tu app de Muni Pass, podrás montarte gratis. Si no, tendrás que pagar 8$. En general, hay bastante cola, por lo que tendrás que esperar, al menos, 30 minutos para poder montarte.
Nosotros cogimos el trayecto de Fisherman´s Wharf a Union Square. Una experiencia súper divertida, yendo por todas las cuestas en este vehículo tan antiguo.
Desde Union Square fuimos andando a cenar al hotel, comimos un sandwich y nos fuimos a descansar.
Para ver el itinerario completo de nuestro viaje, entra en 17 días en Costa Oeste USA.