Para llegar a Tailandia, decidimos aprovechar la escala para visitar Moscú durante unas horas, y así además, hacer los dos tramos de viaje principales de noche, con el objetivo de descansar y dormir en los vuelos.

Volamos con la compañía aérea Aeroflot. Nuestro primer vuelo salía de Madrid a las 23:30, así que cogimos un autobús a primera hora de la tarde desde Vitoria con destino directo al Aeropuerto Madrid-Barajas Adolfo Suarez, donde llegamos sobre las 20:30 tras 4 horas de viaje en bus.

El vuelo Madrid-Moscú duró 4h 45min, llegando a nuestro destino sobre las 05:15. Cuando compramos los vuelos, había muchas opciones con diferentes tiempos de escala. Nos decidimos por un vuelo que hacía una escala de 14 horas en la capital rusa, para así aprovechar a hacer una breve visita de los lugares más relevantes de la ciudad.

Para visitar Rusia, es obligatorio sacar el visado, independientemente del tiempo que vayas estar. Los requisitos para sacar el visado son bastante estrictos. Cuando nosotros lo sacamos, sólo se podía gestionar en una agencia que tramita visados a Rusia, la central de visados rusos. Tienen sede en Madrid y Barcelona, y trabajan con empresas de mensajería para recoger o devolver el pasaporte.

En cualquier caso, puedes mirar más información actualizada sobre los requisitos de visado y otras recomendaciones de viaje en la web del MAEC.

Una vez en el aeropuerto, tras pasar el control de aduanas donde te sellan el pasaporte y te miran el equipaje, puedes dejar tus maletas o mochilas en una consigna, si, como nosotros, sólo vas a visitar la ciudad por un breve periodo de tiempo. Nosotros, aprovechamos además para sacar algunos rublos en un cajero en el propio aeropuerto. Desde allí nos dirigimos a la parada de tren.

Desde el aeropuerto internacional Sheremetyevo de Moscú, hay un tren que te lleva a la ciudad y que te deja en la estación Belorusskaya, desde donde puedes coger fácilmente el metro hasta el centro. Nosotros nos bajamos en la parada Ploshchad Revolyutsii, la más cercana a la Plaza Roja. Desde allí, empezamos nuestra breve visita de Moscú.

Plaza Roja de Moscú
Plaza Roja de Moscú

Nuestra visita duró unas 10 horas, durante las cuales pudimos ver los lugares más representativos y probar algún plato típico. Dejamos muchos sitios sin ver, ya que Moscú es un ciudad a la que dedicar más de un día. Aun así, fue una escapada que mereció la pena.

Volvimos al aeropuerto en tren sobre las 17:00, ya que nuestro vuelo a Tailandia salía a las 19:20. El vuelo duró unas 9 horas, llegando a Bangkok a las 08:30. Fue un vuelo bastante arduo y en el que apenas pudimos descansar ni dormir.

Era la primera vez que viajábamos con Aeroflot. No fue una experiencia demasiado positiva. Los asientos no eran muy cómodos, no había mucho espacio, y, sobre todo, el personal de la compañía no fue muy amable.

Si quieres saber qué visitamos en Moscú, puedes ver nuestro post Qué ver en Moscú.


Para ver el itinerario completo de nuestro viaje, entra en 18 días en Tailandia.