El segundo lugar más visitado de Grecia tras la Acrópolis es Meteora. Si lo visitas, entenderás porqué.

Su origen se remonta a alguno momento entre el siglo IX y el siglo XIII, cuando los primeros ermitaños eran perseguidos y se refugiaban y habitaban cuevas en el lugar.

Estas formaciones rocosas, enfrente de la ciudad de Kalambaka, albergan, a parte de un paisaje espectacular, sus conocidos monasterios.

Además, hay otros lugares curiosos, como la cueva de los pañuelos, en mitad de una pared en la roca. La identificarás por sus cientos de coloridos pañuelos. Cuenta la leyenda que una pareja de musulmanes habitaba el lugar. Un día, el hombre salió a coger leña y se cayó. La mujer, ofreció su velo musulmán a San Jorge para que su marido se recuperara. Desde entonces, el 23 de abril se celebra San Jorge y la gente de Kalambaka, escala hasta la cueva, con 400 pañuelos, que son cambiados por los 400 existentes, en referencia a los 400 años de invasión turco-otomana a la región. Después, reparten los pañuelos entre las mujeres de la ciudad, con la esperanza de que las solteras puedan encontrar pareja.

En cuanto a los monasterios, si bien en el siglo XVI hubo 24 monasterios, actualmente sólo hay 8. De los mismos, 6 permanecen a día de hoy activos y 2 están vacíos. Todos son cristianos ortodoxos y no se rigen por el Papá ni el Vaticano, sino por el Monte Athos.

Los monasterios de Meteora son los siguientes:

Monasterio de San Nicolás 

Este pequeño monasterio tiene una pequeña iglesia, tres plantas y es habitado por dos monjes. Como el resto de monasterios habitados por hombres, cuenta con empleados, que se encargan del mantenimiento, así como del cuidado de los terrenos agrícolas.

Su horario es de 9:00 a 14:00 horas en invierno y de 9:00 a 16:00 horas en verano. Los viernes está cerrado.

Monasterio Varlaam

Construido sobre una roca a una 600 metros, es uno de los más grandes de Meteora. El monasterio cuenta con una iglesia y un pequeño museo religioso. Lo habitan 8 monjes.

Su horario es de 9:00 a 15:00 horas en invierno y de 9:00 a 16:00 horas en verano. Los jueves y viernes está cerrado.

Monasterio de Santa Bárbara

En este pequeño monasterio viven 13 monjas de clausura y es autogestionado por ellas. Si lo visitas, podrás verlas vendiendo las entradas, en la tienda o en el patio del monasterio.

Su horario es de 9:00 a 14:00 horas en invierno y de 9:00 a 17:00 horas en verano. Los miércoles está cerrado.

Monasterio Gran Meteoro

Es el monasterio más grande, conocido e importante de Meteora. Fue construido sobre una roca a más de 600 metros de altura. Lo habitan 7 monjes y llegó a alcanzar una cifra de 300 monjes hace varios siglos.

Su principal atractivo es su patio, desde el que tiene unas vistas increíbles y su iglesia.

Su horario es de 9:00 a 15:00 horas. En invierno está cerrado los martes, miércoles y jueves y, en verano, cierra los martes.

Monasterio de San Esteban

Es un pequeño y sencillo monasterio, autogestionado por 30 monjas y 1 noviciada.

Su horario es de 9:30 a 13:00 horas y de 15:00 a 17:00 horas en invierno, cerrando los lunes. En verano, su horario es de 9:30 a 13:30 horas y de 15:30 a 17:30 horas.

Monasterio de la Santísima Trinidad

Quizás es el más conocido, ya que es la imagen característica que popularizó el sitio en la revista National Geographic. Está situado en una de las zonas más altas de Meteora y es uno de lo más complicados de acceder.

Lo habita 1 monje. Durante la noche no puede acompañarle nadie, por lo que se queda completamente sólo en este gran complejo.

Su horario es de 19:00 a 64:00 horas en invierno y de 9:00 a 17:00 horas en verano. Cierra los miércoles y jueves.

En el recorrido que hicimos nosotros, entramos a 2 monasterios (el Gran Meteoro y el de San Esteban) y paramos en 2 miradores: «la prisión de Tyrion», que debe su nombre a la serie Juego de Tronos y «la roca del atardecer» al ser el lugar desde donde disfrutar de las vistas a la puesta del sol.

Hay más miradores desde los que ver desde una perspectiva diferente las formaciones rocosas, los monasterios, Kalambaka y el valle.

 

En cuanto a los monasterios algunos puntos a tener en cuenta:

  • En todos hay que pagar una entrada de 3€ para entrar.
  • Las mujeres sólo pueden acceder con falda larga. En caso de no llevar una, te la dejarán al entrar.
  • Lleva ropa y calzado cómodo ya que hay que subir escaleras para acceder a los monasterios.
  • No existe un horario de apertura único para los 6 monasterios, por lo que depende del día que vayas, podrás ver unos u otros.

Te contamos también algunas curiosidades de Meteora, que no dejan indiferente:

  • Desde 1920, las mujeres pueden entrar a los monasterios, ya que hubo un incendio y ayudaron a apagarlo.
  • Los monjes son vegetarianos, ya que se dice que toda la carne que antaño venía del mercado era para otros dioses.
  • No se pueden celebrar bodas en los monasterios. Se celebran en la ciudad y al atardecer las parejas suben a hacerse las fotos. Si se rompe la pareja, suben a romper las fotos al mismo lugar.
  • Los monasterios ondean dos banderas: la griega y la del Monte Azos (amarilla con un águila bicéfala).

En cuanto a la formación de las rocas de Meteora, hay dos explicaciones: una científica, que indica que el origen tuvo lugar por un terremoto y el flujo de agua del río Peneos hasta el Egeo y otra mitológica, en la que los Titanes lucharon contra los dioses del Olimpo, batalla que acabó con Zeus petrificando a los Titanes.

Nosotros visitamos el lugar en una excursión desde Atenas. Si tienes más tiempo, puedes hacer la visita por tu cuenta en coche o con algún tour que haga la ruta en más de un día. Si, como nosotros, sólo dispones de un día, tu única opción es contratar un tour ya sea desde Kalambaka o desde Atenas. En este último caso, te enviarán los tickets de tren de ida y vuelta y el recorrido lo harás en minivan, que te recogerá y dejará en la estación de tren, llevándote a varios miradores y a varios monasterios.

La excursión merece totalmente la pena, aunque el día se hace largo. El viaje en tren dura unas 4 horas de ida y otras 4 horas de vuelta. El tren es cómodo, pero aún así, el viaje es cansado. No podrás entrar a todos los monasterios ni de ver el atardecer. Pero, a nosotros nos encantó, lo recomendamos y repetiríamos si tuviéramos sólo un día para verlo.

Excursión a Meteora