En un principio, nuestra idea era recorrer el Parque Nacional Torres del Paine por nuestra cuenta, pero, en la época del año en la que íbamos, no encontramos ninguna compañía de alquiler de coches que nos alquilase uno. Nos comentaron que era peligroso conducir a esas temperaturas, con hielo y nieve, si no estás acostumbrado. Así que decidimos visitarlo con una de las tantas compañías que ofrecen excursiones allí.
Al contratar la excursión del trekking a la base de las Torres, solicitamos también presupuesto para la excursión que recorre el Parque. En Patagonia Planet, cuesta 30.000 CLP por persona, pero, por contratar las dos excursiones con ellos, nos hicieron un descuento.
Durante la ruta, vas con un grupo de personas, en nuestro caso éramos en total 10. Te van a buscar al hotel temprano, aunque no tan temprano como con la excursión del día anterior…
Llevamos nuestro equipaje con nosotros a la excursión, ya que, al acabar íbamos directos a la estación a coger un autobús a Punta Arenas, para dormir allí. Al día siguiente cogíamos un avión muy temprano para irnos a la otra punta del país: San Pedro de Atacama.
Desde el hotel hasta el inicio de la visita hay unos 24 kilómetros. Una vez empiezas la ruta, las Torres del Paine centran las miradas de todos… se ven desde cualquier punto del camino… imponentes…
Pensar que el día anterior estuvimos en su base, hacía que estas vistas fueran aún más especiales para nosotros… Aún seguíamos sin creernos que el día anterior hubiéramos sido capaces de haber subido hasta arriba…
Primero nos dirigimos a varios miradores desde donde contemplar las Torres. El mejor, sin duda, fue el mirador desde la Laguna Amarga. Esta laguna se trasforma en un espejo de las Torres, haciendo que la vista sea única….
Siguiendo la carretera, nos dirigimos al sector del Salto Grande, hasta el Mirador del Lago Nordenskjold y el de Salto Grande.
El paisaje es una maravilla. Además, en Salto Grande, se puede apreciar la descarga de aguas lechosas que vienen de los glaciares.
Después, fuimos a la única cafetería abierta en el Parque para hacer un descanso con la opción de almorzar. El almuerzo no está incluido en el precio del tour y, en esa cafetería no había mucha variedad y todo era bastante caro, así que recomendamos llevarse algo para comer. Nosotros nos llevamos nuestra comida y, allí, nos compramos unos cafés para entrar en calor.
Tras el descanso, nos dirigimos al sector del Lago Grey. Después de una agradable caminata por la orilla del lago y, si las condiciones meteorológicas lo permiten, se ve a lo lejos el glaciar Grey. La verdad es que se ve muy pequeño, apenas perceptible desde la orilla, pero la excursión en barco es muy cara (unos 100€ por persona, aproximadamente) y, después de haber visto el Perito Moreno, nos habían recomendado no hacerlo, ya que el glaciar Grey no es tan impactante como el Perito Moreno.
Pero, la excursión en barco es una buena opción para ver un glaciar de cerca, si no vas a ir a visitar el Perito.
Al concluir la visita, se continúa por la carretera, hasta el mirador del Lago del Toro, donde se percibe la inmensidad y la belleza del Parque.
Para finalizar la visita, te llevan a la Cueva del Milodón, formado por tres cavernas y la denominada “Silla del Diablo”.
El Milodón es parte de la cultura popular. Hay varias estatuas por todo Puerto Natales. Se trata de un animal prehistórico que habitó la zona.
Hay que comentar que la entrada a esta cueva no está incluida en el tour y cuesta 8.000 CLP por persona. Personalmente, nos pareció muy caro para lo que es… y no recomendamos entrar… sólo es una cueva cuyo único atractivo es la figura a tamaño real de El Milodón.
Terminamos la excursión sobre las 17.00 y nos dejaron directamente en la estación de autobuses. Teníamos los billetes comprados con antelación, en la web donde compramos el resto de los billetes de bus. Esta vez viajábamos con la compañía Buses Fernández.
El autobús salía a las 19.00, así que nos acercamos a la ventanilla de la compañía para ver si nos podían adelantar la salida al de las 18.00. Nos indicaron que esperásemos a que se llenara el bus y, si quedaban plazas, podríamos montarnos sin problema.
Y, así fue, cogimos el bus de las 18.00, llegando a Punta Arenas a las 21.00. Ya era de noche y no había nadie por las calles, así que nos fuimos directos al hotel Chalet Las Violetas. Fue el hotel más barato y cercano a la estación que encontramos. El precio por una noche fue de 45€.
El dueño fue muy amable y atento con nosotros. Es un pequeño negocio familiar, sencillo, pero con todo lo necesario para pasar una noche tranquila y cómoda.
Como al día siguiente teníamos que ir muy pronto al aeropuerto y no vimos opción de bus para esas horas, el dueño del hotel nos concertó un taxi para el día siguiente.
Para cuando instalamos, era ya muy tarde, así que cenamos en la habitación del hotel: unas galletas y uno de nuestros batidos.
Para ver el itinerario completo de nuestro viaje, entra en 19 días en Uruguay, Argentina y Chile.
