Amanece un nuevo día en Asturias. Vimos que estaba despejado, así que decidimos pasar la mañana en la playa de Serantes para bañarnos, tomar el sol, leer y pasear.
Tras una mañana tranquila, comemos también con calma en el bungalow para así disfrutar a la tarde de una visita a Cudillero.
Desde el camping tardamos unos 40 minutos. Tanto si vienes del Oeste como si vienes del Este, la mejor forma de llegar a Cudillero es por la A-8 y tomar las salidas que dan acceso a la CU-1 o CU-2, para entrar a una zona u otra del pueblo.
Nosotros entramos a Cudillero por la zona del puerto, donde hay un parking público gratuito. Estaba bastante lleno, pues Cudillero es un pueblo bastante turístico.
Es un pueblo pequeño que se recorre fácilmente. Para visitarlo basta con callejear e ir a los miradores que tiene para observar la estampa de esta villa pesquera tan colorida, asomando entre las montañas, con el mar de fondo.
Nosotros disfrutamos mucho callejeando por todo el pueblo, entre sus calles estrechas, tanto en la parte baja, como en la parte alta del pueblo.
Después de recorrer esta villa, nos paramos en el bar Chupi a tomarnos algo y nos acercamos a una tienda de artesanía que habíamos visto en la calle principal: Solina & Pixueta, donde compramos un par de boles de cerámica hechos y pintados a mano.
Saliendo del pueblo, ya cerca del puerto, hay varios puestos de souvenirs. Nosotros compramos un cuadro pintado a mano, en un trozo de madera, en uno de esos puestos: Pabels.
Si queréis saber más sobre nuestra visita a Cudillero, podéis entrar en nuestro post: Qué ver en Cudillero.
Después de esta visita, decidimos acercarnos al Cabo Vidio, que estaba de camino de vuelta a Serantes. Desde Cudillero tardamos unos 15 minutos por la citada A8.
En la zona hay varios parkings. Elegir uno o otro dependerá de lo que quieras andar. También hay aparcamiento junto al faro, aunque es pequeño, por lo que la gente deja el coche en la cuneta.
Nosotros aparcamos un poco alejados, ya que hay un precioso paseo que rodea la costa, por los acantilados, hasta el faro.
Las vistas son espectaculares durante todo el camino.
Cerca del faro nos encontramos con bastante gente, ya que es un sitio perfecto para ver el atardecer. Hay un chiringuito donde se concentra la mayoría de la gente para tomar algo mientras atardece.
Llegamos hasta el faro. El edificio no es diferente a otros faros, pero, por su ubicación, es muy importante en la zona, ya que el entorno del cabo Vidio es muy peligroso para su navegación por la multitud de escollos e islotes, sobre todo de noche o en condiciones de baja visibilidad por niebla, bruma o lluvia.
Volvimos andando al coche, mientras veíamos cómo se iba metiendo el sol en el mar.
Y con ese precioso atardecer, acabamos el día volviendo al camping a descansar.
Para ver el itinerario completo de nuestro viaje, entra en 17 días en Asturias y Norte de León.