Antes de elegir este destino, sabíamos que iba a ser difícil encontrar supermercados y restaurantes sin gluten. No sólo porque tienen desconocimiento de la celiaquía, sino porque muchos de sus platos tienen como base pan, en diferentes formas.

Por eso, al hacer la maleta, llevamos algunos productos sin gluten como pan, tortas sin gluten, batidos sustitutivos, etc.

Bakú

En la capital del país, esperabamos encontrar más opciones, aunque cuando miramos en la app Find Me Gluten Free, nos dimos cuenta de que no había ninguna reseña en todo el país…

Decidimos coger apartamento para poder cocinar. Fue muy dífcil encontrar productos sin gluten en los supermecados, aunque encontramos un par de tiendas que sí tenían algunos. El resto de productos genéricos (huevos, leche, queso…) los pudimos comprar en el supermercado. Sólo encontramos productos sin gluten como pan, galletas, etc. en un supermercado de la cadena Bravo a las afueras de Bakú.

En cuanto a restaurantes, tratamos de preguntar en varios sin mucho éxito. Sólo encontramos uno que nos dió tranquilidad y allí cenamos una noche.

  • Türco Burrito

Un restaurante turco situado en pleno centro de la ciudad. Tras explicarles el tema sin gluten, nos ofrecieron unas brochetas de carne y un plato de quesos. Nuestra sorpresa fue que, nos dijeron que no nos podían poner el acompañamiento de arroz, ya que tenía harina. No nos había pasado nunca con el arroz y, desde entonces, preguntamos cada vez que lo pedimos.

Cenamos bien a un precio razonable.

Qabala

En este pueblo turístico iba a ser muy difícil encontrar productos sin gluten en supermercados, también en restaurantes. El guía nos recomendó un restaurante cerca del lago donde podrían hacernos alguna opción.

  • Nohur Gol Restoran

El restaurante es bonito, con mesas con vistas al lago. El guía llamó al chef y le explicamos el tema sin gluten, que ya conocía. Nos ofreció unas brochetas que hacían en la barbacoa y nos aseguró que no existiría contacto cruzado.

El sitio y la comida nos gustaron. El precio fue razonable y volvimos otro día a pedir el mismo plato.